El virus COVID 19 ha sorprendido al mundo entero por su velocidad de propagación. El contagio es rápido y la mortalidad importante. La ausencia de vacunas u otros fármacos nos ha dejado débil ante la naturaleza.
Para disminuir el contagio, el mundo entero ha pasado al confinamiento. Nuestra forma de vivir y de comprender los acontecimientos ha cambiado.
Lo que digo hoy, es la comprobación real de que mí hija ha tenido algunas oportunidades Primeramente, la de escapar del virus, pero también la de poder continuar su aprendizaje escolar a su nivel.
Mi hija tiene habilidades intelectuales.
La situación
Vi por mí mismo las capacidades intelectuales de mí hija. El aprendizaje le fue beneficioso. Era fácil comprobar que su nivel era alto. Iba bien antes de iniciar la escuela
Por eso me interesé por las posibilidades existentes en Panamá para su integración escolar. En el 2018, busqué y encontré una escuela que me parecía de buen nivel y muy responsable.
Normalmente, mí hija iba a una clase pre-jardín (Pre-kínder). Era evidente para mí que esto no podía hacerse. Mí hija (o cualquier otro niño) que sabe contar, sabe armar puzles de 60 piezas, sabe escribir su nombre, debe integrar a una clase de su nivel. Sólo tenía tres y medio.
La conversación con la Directora, y después de superar una prueba psicológica, se supo que podía entrar a la primaria (primer grado) Pero era mucho para su edad, entonces se le
permitió que entrara en Jardín (Kínder) para el año 2019. Mi hija tenía cuatro años.
Hice lo correcto para su escuela. Cuando la misión de todos los participantes es únicamente el interés de los niños, resulta evidente y fácil avanzar. Es la primera oportunidad para mi hija.
Descubrimiento de la educación preescolar
Para su regreso a la escuela, el mundo entero se enfrentaba a la expansión del virus. La palabra pandemia aparecía.
A mí hija le encantó ir a la escuela. La habíamos preparado hace mucho tiempo. En cambio, como todos los padres, el primer año escolar es estresante. Cómo iban a ser las primeras relaciones con los compañeros de clase, cómo iba a pasar todas sus horas fuera de casa.
Pero afortunadamente, no hay problemas de integración para mí hija. Resultado de una buena preparación psicológicamente, probablemente.
Sólo que han surgido las decisiones gubernamentales. Una nueva palabra: confinamiento. Las escuelas debían cerrar en menos de dos semanas, y teníamos que adaptarnos.
La segunda oportunidad apareció. La escuela rápidamente, y después de múltiples reuniones, toma la decisión de continuar las clases en línea. La informática lo permite, así que teníamos que usarlo. Esta decisión, tanto económica como pedagógica, es perfecta.
Después de vacilaciones, ensayos y errores, se ha establecido una rutina. Se ha establecido un calendario escolar. Esto es beneficioso para los niños, les tranquiliza, los lazos se tejen a distancia. Aprenden las interacciones a distancia, encuentran su lugar.
Para mí también, pues descubro el programa escolar y sus aplicaciones diarias. Las clases se limitan a 40 minutos. El total semanal en español es de 3.20 horas; en inglés de 1.20 horas; en francés de 40 minutos. No hay otras materias pero las bases están presentes. También los profesores a menudo superan los 40 minutos para terminar correctamente la clase. Estoy satisfecho sobre el funcionamiento, Es difícil pedir más.
Pero, como siempre existe un PERO, se trata del contenido de los cursos. Rápidamente se ha comprobado que no es suficiente.
La alta capacidad intelectual
Todos sabemos que los sistemas escolares gubernamentales han instituido pedagogías para la mayoría. Es evidente la necesidad de impartir educación a toda la población. Así, muchos niños pueden evolucionar e integrarse en su mundo.
Este sistema también ha puesto de relieve las diferencias entre los niños: sociales, económicas y conductuales. En este último punto me refiero, evidentemente, a los niveles de aprendizaje. El último diseño ha puesto de relieve la existencia de niños con un alto potencial intelectual.
En este contexto, la educación gubernamental es la más básica que puede existir. Es un programa a seguir. Me han explicado que está absolutamente prohibido apartarse de ella. Si la escuela toma iniciativas, puede ser sancionada. Esto implica que los profesores imparten las clases lo mejor que pueden dentro de una guía.
No quiero ser presuntuoso, pero las clases que recibe mi hija son de bajo nivel general. Es cierto que la parte beneficiosa es sostener interacciones. Solamente estas interacciones están en su detrimento. Mi hija asiste a todas las clases, pero para eso tiene que ponerse al nivel de la clase. Y he visto su tendencia a retroceder. A querer ser como los demás, naturalmente puso un freno en su aprendizaje. Cuando en la clase aprende a contar hasta 10, comprende inmediatamente que no es necesario saber contar hasta 50 o conocer las unidades y decenas.
Aparece su tercera oportunidad. Las clases duran sólo 40 minutos. Además, puedo seguirlas en directo. También la maestra graba todas las clases y podemos descargarlas. Sí, es una buena escuela. Estos 3 aspectos me permiten intervenir en su aprendizaje, explicar más en detalle o corregir algunos aspectos para ella.
Los cursos en línea son excelentes porque puedo adaptarlos a su nivel. Su ritmo de aprendizaje se ralentizó durante unas semanas, el tiempo que yo entendía. Luego volvió a su nivel. Porque ella también entendió por qué.
Qué suerte para ella aprender en casa. Aprendió cómo comportarse con la escuela y sus compañeros, manteniendo su ventaja.
Mi conclusión
Sin este trágico suceso de la pandemia en la que tantas personas han sufrido, o siguen sufriendo, mí hija podría haber perdido mucho.
En lo que respecta a los niños con capacidad intelectual superior, quedarse solos en una clase de un nivel inferior puede convertirse en una tragedia para ellos. Son tan frágiles. Con los avances de la ciencia, lo sabemos y conocemos las maneras para remediarlos. A menudo las soluciones son simples, pero tropiezan con la dificultad de un sistema educativo riguroso.
Y sin embargo es la más elemental de las lógicas. ¡Imagínese volver a la universidad con todos sus conocimientos actuales y verse obligado a tomar clases durante muchas horas, y hacer los ejercicios!
Un niño con alta capacidad intelectual se ve en ésta posición, además de todas sus dificultades emocionales.
La esperanza de que mi hija pueda continuar su escolaridad sin la presión del sistema educativo.
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