Aprender a leer: Es un paso importante. El niño sale del mundo de los bebés para entrar en el de los mayores. Los esfuerzos que realiza para este aprendizaje son para llegar a ser como los adultos. Conocer por fin el significado de todos estos signos.
Algunos niños aprenden más rápido que otros, pero también algunos niños aprenden antes que otros. A veces las brechas de aprendizaje son realmente muy grandes. Vamos a ver esto en detalle.
El funcionamiento del cerebro
Nuestro lenguaje para poder expresarse es parte de las cosas innatas de nuestro cerebro. Un bebé no aprende a hablar, lo hace solo escuchándonos.
En cuanto a la lectura, esto es diferente, tenemos que aprenderlo. De hecho, la evolución del cerebro humano inventó la escritura en su necesidad de comunicación. Así que esta invención no es un logro.
Nuestro cerebro ha tenido que adaptarse para aprender a reconocer formas para el trasvase en sonido, pero también para transmitir ideas, representaciones gráficas o sonoras, situaciones, etc....
Stanislas Dehaene, neuropsicólogo frances, descubrió con el neurólogo Laurent Cohen, que la lectura desarrolla un área de la forma visual de las palabras, oculta en la región del córtex occipito-temporal del hemisferio izquierdo. En esta región, los circuitos neuronales, diseñados para el reconocimiento de objetos y rostros, se reciclan para descifrar la escritura.
Un estudio independiente francés (https://www.ra-sante.com/enfant-precoce-etude-cerveau-lyon-121798.html) sobre el funcionamiento del cerebro de los niños con altas capacidades intelectuales ha puesto de manifiesto conexiones más importantes en los hemisferios. Esto significa que la información circula más rápidamente.
Todos somos iguales en la obligación de aprender a leer, pero algunos niños tienen mayores facilidades.
Consecuencias para el aprendizaje
Resulta evidente, y esto confirma los exámenes clínicos desde hace muchos años, que es lógico que un niño con mayores capacidades intelectuales aprenda más rápido.
Esta evidencia puede ser medida. La relación entre la edad de aprendizaje y el cociente intelectual ha sido establecida por varios psicólogos de la infancia.
La mayoría de los psicólogos están de acuerdo en que la precocidad de la lectura es un signo de alta capacidad intelectual.
Además, hay que tener en cuenta los avances en los métodos de aprendizaje. Las diferentes constataciones ponen de manifiesto la necesidad de adaptación al nivel mental de los niños, y no a su edad cronológica. Stanislas Dehaene lo demuestra perfectamente.
¿Y por qué no?
El libro de la Dra. Deborah Ruf,(5 niveles de talento: temas escolares y opciones educativas) relaciona las habilidades adquiridas por un niño con su nivel de CI. (https://eleanormunsonphd.com/2011/01/the-five-levels-of-giftedness/)
Es un enfoque que puede satisfacer a muchos padres, pero no es suficiente.Como todos sabemos, establecer un coeficiente intelectual sin un examen ante un psicólogo especializado no es concluyente.
conclusiones
Sí, la lectura temprana es un signo de alta capacidad intelectual. Entre los 4 y los 5 años, es seguro que el niño posee un alto potencial. Incluso si usted lo acompaña en su aprendizaje, él sabrá leer antes de la media general de 6-7 años.
Así que ayúdale, no lo empujes, aprenderá naturalmente. Dale lectura, variar los temas.
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